Carabinero que disparó a chofer de Uber declarará en calidad de imputado
Por ahora se llevan dos investigaciones en paralelo. El chofer también deberá declarar en esa misma calidad.
La semana pasada un funcionario de Carabineros y un conductor de Uber protagonizaron un confuso incidente, que terminó con disparos debido a que el chofer se negó a un control de tránsito en el Aeropuerto de Santiago.
El cabo segundo, Blas Villarroel, declaró ante el fiscal Manuel Urzúa: “Solo resguardar mi integridad física, que se vio vulnerada, haciendo uso racional de la fuerza, utilizando el arma letal para repeler el ataque”, consigna El Mercurio.
En su relato, el funcionario agregó: “Me percato que Rodolfo enciende el motor y me atropella, empujándome unos pasos hacia atrás, por lo que desenfundé mi armamento de servicio, manteniéndolo en 45 grados, apuntando hacia el capó del vehículo, apegado a mi costado derecho, tomándolo con mi mano derecha, con el dedo fuera del disparador, ordenándole al conductor a viva voz, bájate, bájate del vehículo. Repitiendo esto en reiteradas ocasiones, (él) haciendo caso omiso a la orden antes señalada (…) la finalidad era detener la acción del conductor y no quitarle la vida”.
A esta declaración se sumará una segunda, esta vez como imputado al igual que el conductor Rodolfo Muñoz.
Con esto se realizan dos investigaciones en paralelo. La primera sobre el conductor, quien quedó con arraigo nacional y con prohibición de acercarse al carabinero. Y la segunda relativa al cabo segundo, dado que según explicó el fiscal Eduardo Baeza, “la acción ejecutada por el funcionario puede ser constitutiva del delito de lesiones, también puede ser constitutiva del delito de homicidio frustrado, al menos con dolo eventual”.