Nueva externalización: la bomba de tiempo que tiene en vilo a trabajadores y rostros de Canal 13
La estación evalúa que varios de sus programas pasen a ser desarrollados por una productora externa liderada por el ex jefe del área de telerrealidad Rodrigo Leiva, desvinculado tras una serie de graves acusaciones. Esto podría abrir espacio a nuevos despidos.
Sorpresa causó el viernes pasado entre los funcionarios de Canal 13, en medio de los festejos por el aniversario número 59 de la estación, la presencia del ex productor ejecutivo del área de telerrealidad Rodrigo Leiva, a quien se le pidió la renuncia a comienzos de julio pasado tras una serie de conflictos y polémicas que vivió con sus equipos.
A dos meses de su partida, quien fuera el hombre fuerte de los programas de docureality continuaba siendo visto por los pasillos del canal como de costumbre, lo que alimentó los rumores de un eventual regreso formal. Esa noche, mientras se celebraba el cumpleaños de la estación propiedad de Andrónico Luksic, los trabajadores también pudieron conocer algunos de los planes de Leiva.
Según escucharon varios, el ex productor comentaba a su entorno y “se jactaba” de que el director ejecutivo de la estación, Javier Urrutia, le había pedido presupuestos para realizar “proyectos más baratos” de manera externa con su productora, Northfield, lo que hoy ya realiza con el programa “Ellos la hicieron”. El desarrollo de ese espacio lo ha mantenido ligado al canal desde su salida, pese al término de su contrato.
Las informaciones también apuntaban a que el reconocido productor había entregado una propuesta formal a ejecutivos de la señal para, incluso, externalizar dos programas que hoy se realizan internamente, con una mezcla entre equipos de planta de la estación y de la empresa Secuoya, que hoy tiene en sus manos parte importante de la producción técnica: “En su propia trampa” y “Contra viento y marea”.
Varias fuentes confirman que la propuesta ya fue hecha, ofreciendo presupuestos inferiores a los costos de operaciones que se manejan actualmente, lo que estaría siendo analizado de manera formal en el cuarto piso de Inés Matte Urrejola 0848.
El “regreso” de Rodrigo Leiva molestó profundamente a trabajadores y algunos rostros involucrados, que supieron de las tratativas y la posibilidad de que se haga cargo de los programas que aún el canal realiza de manera interna.
No solo porque una vez más la estación continuaría externalizando sus producciones, reduciendo aún más el staff de funcionarios, sino porque -más allá de lo que se supo de manera pública- la salida del ex productor ejecutivo del área respondía principalmente a varias denuncias que se hicieron en el Departamento de Personal en su contra, las que influyeron en su desvinculación en julio pasado, aseguran conocedores del proceso.
Las acusaciones de los equipos se transformaron en una investigación interna donde se le acusaba de maltrato laboral e, incluso, de un enfrentamiento de carácter homofóbico que tuvo contra un trabajador, a quien emplazó a que “saliera del clóset” en medio de una discusión frente a todo el equipo que lideraba. Ello derivó en que el periodista tuviera una licencia psiquiátrica por tres semanas.
También consta en esa denuncia algo que ya era vox populi en el canal: el uso que daba Leiva a los recursos de la estación para su beneficio personal, como los vehículos y de cámaras para sus proyectos, lo que varias veces complicó las labores realizadas por periodistas y técnicos.
El vínculo con ejecutivos
Desde su salida formal, Leiva se ha mantenido vinculado al canal a través de su productora en la realización del programa “Ellos la hicieron”. Para ello, el productor ha continuado ocupando oficinas de C13 por un “pago simbólico” que le permite seguir en contacto con sus antiguos compañeros, pero también con quienes lo denunciaron por maltrato laboral y homofobia.
El vínculo la estación también le ha significado la posibilidad de utilizar salas del edificio y estudios de las antiguas dependencias de Chilevisión -que fueron compradas por la empresa de Luksic, luego del traslado a Machasa- para los ensayos de al menos dos producciones musicales que lideró: “La novicia rebelde” y “Mamma Mia”.
Según lo que han sabido trabajadores del canal, el ex funcionario busca que el mismo equipo que lidera el programa que aún tiene en pantalla sea el que pudiera hacerse cargo de la producción de la novena temporada de “En su Propia Trampa” -este mes se estrena la octava- y del programa “Contra viento y marea”, conducido por Francisco Saavedra.
Esta maniobra, que lo traería de regreso a encabezar proyectos para la estación de manera externa, podría implicar nuevos despidos o reubicación de funcionarios de planta que, por distintos motivos, hoy no pueden ser desvinculados.
“Vemos con mucha preocupación que se siga apostando por este formato de externalización de contenidos que está imperando, porque eso va a terminar por quitar potencia al canal y a sus propios trabajadores. Leiva siempre se ha manejado como una productora en sí mismo en la realización de sus programas en el canal y eso hoy podría seguir de una manera similar”, cuestiona el presidente del sindicato de Canal 13, Iván Bezzano.
Cuando Leiva salió del canal en julio, el comunicado oficial hablaba de “discrepancias en el manejo de equipo y de la gestión de algunas situaciones”, que “nos hacen imposible continuar trabajando juntos en este momento. En cualquier caso estas diferencias no empañan su éxito televisivo ni los grandes programas que él y sus equipos han construido para nuestro canal”.
Sobre su propuesta y una posible externalización de más contenidos, desde Canal 13 explicaron escuetamente que Leiva hoy solo lidera un programa con Northfeld Producciones y que los otros dos programas son propios de Canal 13. Otras altas fuentes, sin embargo, confirmaron que existen conversaciones como las detalladas en esta nota.
Consultado por El Dínamo sobre todos estos hechos, Leiva afirmó que las oficinas que ocupaba en Canal 13 hasta este viernes eran para “mantener una reunión más fluida” y que “por eso” estuvo en la fiesta del canal, pese a no ser funcionario.
Sobre las acusaciones en su contra que se registran en el Departamento de Personal del canal, afirmó: “Prefiero no hablar, no me gusta hablar con la prensa”.