Prohibir la entrada al Metro y zonas comerciales: los usos que buscan darle al sistema de reconocimiento facial en el sector oriente de Santiago
Los municipios de Las Condes y Lo Barnechea esperan que la herramienta comience a operar durante 2019. Además de reconocer rostros, el sistema será capaz de crear bases de datos y detectar sonidos.
Entre 2017 y 2018, los alcaldes de Las Condes y Lo Barnechea anunciaron la implementación de un sistema de reconocimiento facial en sus comunas. La herramienta todavía no está operativa, pero ambos municipios esperan inaugurarla durante 2019.
El alcalde de Lo Barnechea, Felipe Guevara (RN), adelantó que el sistema, además de reconocer rostros, será capaz de “crear bases de datos”, detectar sonidos y alertar a la policía sobre la “permanencia sospechosa” de alguna persona.
En paralelo, en Las Condes esperan ocuparla para prohibir la entrada de personas con antecedentes a estaciones del Metro y centros comerciales: “La idea es que la fiscalía trabaje órdenes de restricción para que las personas que habitualmente cometen cierto tipo de delito no puedan ingresar”, aseguró la encargada de Seguridad de Las Condes, Javiera Benítez a El Dínamo.
Según la encargada, el software va a identificar solo a las “personas de interés” que estarán en la base de datos de la Policía de Investigaciones. “No va a identificar a cualquier persona”, dice Benítez.
Además del reconocimiento en vivo, la herramienta tendrá un uso forense. “La policía va a tener la capacidad de meter cualquier video, desde Arica a Punta Arenas, y ver si en ese video aparece alguna persona de interés”, explica la encargada de Las Condes.
A pesar de que la herramienta comenzará a funcionar prontamente, los detalles de sus alcances todavía no son públicos: el sistema fue comprado por Las Condes y Lo Barnechea a través de la Asociación de Municipalidades del Sector Oriente. La organización, que funciona como una corporación privada, no ha publicado los documentos que dan cuenta de esta compra, a pesar de que está obligada a hacerlo por la Ley de Transparencia. Además, ninguno de los dos municipios ha accedido a entregar documentación que permita comprobar cómo funciona el sistema, qué información recolecta y cuánto se pagó por él.
Desde Las Condes solo informaron que el software y sus servicios asociados fueron comprados a la multinacional Idemia (ex Morpho) y tuvieron un costo aproximado de $600 millones.
Revisa más detalles sobre esto en el reportaje “Drones y reconocimiento facial: los detalles del plan del gobierno y municipios para vigilar a la población”.