
La primera denunciante de los abusos cometidos por Renato Poblete, Marcela Aranda, afirmó que el informe que confirmó los delitos cometidos por el fallecido sacerdote demuestra que indubitablemente y en forma contundente, que estamos ante un depredador sexual que dañó a muchas personas“.
“Me alegro mucho de haber tenido el valor, sobretodo fortalecido por un gran entorno de amigas y amigos que han estado permanentemente e incondicionalmente con su cariño conmigo, y que me haya permitido develar lo que me había pasado, de denunciar, desterrar lo que yo había sufrido“, expresó Marcela Aranda ante los medios.
Respecto a su testimonio, sostuvo que “pienso que eso abrió un paso a las otras víctimas. En estos momentos quiero estar con ellas, mi corazón quiere estar con ellas, y espero que como para mí lo ha sido, para ellas también haya sido un camino de sanación”.