Inquietud existe entre las pequeñas y medianas empresas generadoras de electricidad y las de energías renovables tras el anuncio del Presidente Sebastián Piñera, acerca de crear un mecanismo de estabilización de precios, el cual en la práctica permita congelar las tarifas eléctricas.
Y es que, por ejemplo, en el caso de las empresas generadoras de energía renovables este mecanismo podría tener un impacto directo en sus finanzas, lo que les podría complicar a la hora de cumplir con los compromisos acordados. Esto, considerando que un mecanismo como éste no permitiría trasladar las diferencias de tipo de cambio sino hasta varios años más, y por otra parte, no generaría una compensación por los costos financieros que podría significar.
A juicio de algunas pequeñas y medianas empresas generadores y de la industria de energías renovables, este mecanismo de estabilización que busca impulsar el Gobierno estaría más acorde a las grandes empresas, pues son las únicas que no están endeudadas.
Esto, se entiende -además- porque las generadoras de menor envergadura trabajan básicamente a través de mecanismos de project financie, es decir, desarrollan los proyectos en conjunto con sus bancos acreedores. Por lo tanto, aumentar el riesgo de tipo de cambio, alterar la certeza de los pagos y hacer asumir costos financieros que posiblemente no podrán proyectar en el tiempo, podría dificultar el desarrollo de proyectos en este segmento.
