Ex subsecretario de Hacienda, Alejandro Micco: “Si fuéramos todos pobres, no habría salud”
El ex subsecretario de Hacienda en el Gobierno de Michelle Bachelet aseguró a EL DÍNAMO que el debate de priorizar o no la salud ante la economía es una disyuntiva falsa, ya que son cosas que deben ir juntas.
La pandemia del coronavirus ha afectado fuertemente a la economía chilena: durante el segundo trimestre de 2020 reportó una caída de 14,1% del PIB. Sin embargo, el ex subsecretario de Hacienda del segundo Gobierno de Michelle Bachelet, Alejandro Micco, asegura que el país aún está en condiciones de enfrentar una crisis mundial no vista desde la década de 1930.
La estadística del Banco Central indicó que la actividad económica sufrió su peor caída desde 1982, disminución que se explica por la emergencia sanitaria con afectación a la movilidad de las personas y el normal funcionamiento de establecimientos productivos. Asimismo, la deuda externa se ubicó en US$208.108 millones, un 85,9% del PIB, explicado por la revalorización de los bonos emitidos por los empresas privadas y Gobierno.
Por su parte, a fines de junio, la Dirección de Presupuestos (Dipres) -dependiente del Ministerio de Hacienda- indicó que la deuda fiscal podría llegar al 70% del PIB en los próximos 10 años si se sigue con el actual ritmo de gasto.
En conversación con EL DÍNAMO, Micco -economista y docente de la Universidad de Chile- afirmó que la deuda bruta Chile se encuentra con una deuda fiscal “razonable” que permite al Estado poder enfrentar hoy en día la crisis provocada por el coronavirus. “Dada la emergencia, se justifica un aumento del gasto fiscal y de deuda”, indica el ex subsecretario.
Para Alejandro Micco, las prioridades que debiera tener el Estado en este contexto son aplicar medidas de apoyo a la población, apoyar a que no se destruya el capital productivo y, como tercer punto, un apoyo a la recuperación económica, siempre cuidando la salud de las personas. En esa línea, el economista indica que el Gobierno ha iniciado proyectos en la dirección correcta, aunque hubiera preferido que se acelerara y se ampliaran las ayudas tanto a las personas como pymes.
Salud vs. Economía
Según la última encuesta de desocupación realizada por el INE, la tasa de desocupación del trimestre abril-junio de 2020 reveló un desempleo histórico 12,2% ,la cifra más alta desde 2010. En la práctica, hay personas 996.910 sin trabajo.
Otro de los aspectos que destacó el INE en su boletín fue la pérdida de puestos de trabajo, con 1,7 millones de puestos de trabajo destruidos en un año. “Esto es un golpe social tremendo”, afirma Micco a EL DÍNAMO, recalcando que cualquier reactivación debe ir acompañado por medidas sanitarias.
“La economía siempre tiene que estar en servicio del bienestar de las personas. Cuando se habla de priorizar o no la salud vs. la economía, es una disyuntiva falsa. Son cosas que deben ir juntas”, asegura el ex subsecretario, expresando que los ingresos permiten vivir y dar dignidad a las personas.
Si bien reconoce que es complejo, Micco indica que “los problemas son siempre multidimensionales. El coronavirus es una enfermedad que mata gente, pero el desempleo también es un problema social. Si fuéramos todos pobres, no habría salud. Hoy hay que ver cómo se consiguen las dos cosas”.
Escenario post-coronavirus
Consultado sobre cómo la economía chilena queda en pie para futuras crisis económicas, Alejandro Micco asegura que “siempre han habido crisis y siempre van a haber crisis (…) la pandemia nos pone en alerta para tener políticas globales activas coordinadas y así estar mejor preparados”.
En términos fiscales, el ex subsecretario de Hacienda indica que el Estado debe tener en cuenta que se debe tener capacidad de gasto fiscal para situaciones de crisis. “Importa mucho tener las cuentas ordenadas, pero la magnitud de la crisis justifica una política fiscal más agresiva“, afirma Micco a EL DÍNAMO.
Afirma que debe existir un sistema de protección social “más potente”. De acuerdo al ex subsecretario, “pudo ser más generoso, pero si no hubiéramos tenido el Seguro de Cesantía, 700 mil personas estarían sin ingresos”.
De igual forma, Micco apunta a que esto tiene que venir acompañado con mejoras al acceso de Salud, preguntarse “si las cuarentena pueden realizarse sin la necesidad de tener ollas comunes (…) cómo asegurar los ingresos de la población cuando debe estar lo más confinada posible, y cómo desarrollar políticas unidas entre lo sanitario y la generación de empleos”.