Federación de Trabajadores del Cobre se baja de mesa de diálogo por cierre de fundición Ventanas
Los trabajadores no están de acuerdo con la modificación de la ley que permite a la fundición procesar los concentrados de la pequeña y mediana minería.
La Federación de Trabajadores del Cobre (FTC) anunció su salida de la mesa de diálogo con Codelco por el cierre de la fundición Ventanas, explicando que buscan discutir los alcances de la modificación a la Ley 19.993, que persigue que la instalación deje de procesar los concentrados de la pequeña y mediana minería.
“Esta determinación la realizamos con el convencimiento que reforzaremos y continuaremos desplegando nuestros espacios de diálogo e influencia con actores políticos y sociales, de manera de lograr el objetivo superior para que Ventanas; sus trabajadoras y trabajadores, continúen realizando sus operaciones y fundiendo riqueza y progreso para Chile, de manera sostenible, eficiente y competitiva”, sostuvieron en un comunicado.
Codelco informó el cierre gradual de la fundición Ventanas ante los constantes episodios de intoxicación de los habitantes de Quintero y Puchuncaví.
El presidente ejecutivo de la empresa estatal, Andrés Sougarret, detalló que “hay un elemento central: si esta fundición es capaz o no de alcanzar un estándar de 98% de captura o superior. Si bien hoy cumple con la norma de 95%, difícilmente en el futuro podrá hacerlo con la misma tecnología que tiene hoy”.
Otro motivo que se consideró, agregó Sougarret, fue que en el cordón industrial se miden gases que la fundición emite, “pero hay otros que no, como los compuestos orgánicos volátiles. Estamos ubicados en un polo industrial de alta conflictividad y contaminación, con presencia de otras empresas que intervienen en la actividad industrial y rodeados de dos importantes comunas, Puchuncaví y Quintero, donde viven 50 mil habitantes hoy día”.
Por último, mencionó la condición de la bahía. “Nosotros no podemos controlar la calidad meteorológica del aire. De los 365 días del año, 33% de los días hay condiciones adversas para la dispersión de los gases. Es decir, hay un período importante en nuestro calendario en que, para garantizar la calidad del aire, tenemos restricciones que afectan nuestro proceso de fusión y nos exponen a peaks de SO2, como fue el ocurrido en la madrugada del pasado 6 de junio”, explicó.