Nuevo sistema frontal en zona central del país: cómo enfrentar las bajas temperaturas

El Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres publicó un balance de la cantidad de lluvia caída en las diversas regiones de la zona centro sur del país, en el contexto del sistema frontal de hace algunos días y que dejó graves consecuencias en la población.

La medición fue realizada hasta el 26 de junio, día donde el frente perdió su intensidad. Las cifras hablan que la mayor cantidad de lluvia fue registrada por la estación Termas de Chillán, con 589 milímetros, mientras que en Retiro hubo 157 milímetros. ¿Pero cuáles son las proyecciones meteorológicas para los próximos días en el país?

Se estima que viviremos un nuevo sistema frontal, concentrado en algunas regiones específicas. De acuerdo con Meteorología de Chile, hay un aviso de precipitaciones normales a moderadas desde la noche del lunes 3 de julio hasta la mañana del martes 4 de julio en las regiones de Los Ríos y Los Lagos.

Para la zona central, en tanto, se proyecta que durante los últimos días de la próxima semana un sistema frontal que se trasladará de forma lenta desde la zona sur dejará precipitaciones en las regiones Metropolitana, O’Higgins y Valparaíso. Eso sí, las precipitaciones no serán tan intensas como las registradas durante el último evento climatológico y se podrían percibir aproximadamente a partir del viernes 14 de julio.

Este fenómeno vendrá acompañado de frío intenso, algo que ya se pudo sentir durante los últimos días en la Región de Magallanes, donde se emitió una alerta por bajas temperaturas extremas. Las proyecciones indicaron que los termómetros en dicha zona podrían llegar hasta los -10 grados. Es en este escenario que existen algunas recomendaciones para poder sortear de forma segura este tipo de eventos, que se repetirán a lo largo del invierno que recién parte.

Aislamiento térmico

Además de contar con dispositivos calentadores como estufas o aires acondicionados frío-calor, el aislamiento térmico es fundamental para mantener la temperatura dentro del hogar, sin sufrir pérdidas de energía, lo que se traduce en espacios más templados, pero también en un ahorro significativo de dinero.

En ese contexto se recomienda verificar el estado de las ventanas y puertas, para asegurar de que estén bien selladas y no haya corrientes de aire frío. Los burletes o sellos de silicona para anular las brechas y reducir así la pérdida de calor son alternativas recomendadas.

También es prudente considerar la posibilidad de agregar aislamiento adicional en las paredes y techos del hogar para reducir la pérdida de calor. El aislamiento de fibra de vidrio o lana mineral puede ser una opción efectiva. De la misma forma, se pueden utilizar cortinas pesadas o persianas térmicas en las ventanas para evitar la entrada de aire frío y mantener el calor.

Calefacción eficiente

Si el hogar cuenta con calefacción central, se debe asegurar que esté funcionando correctamente, limpiando o reemplazando los filtros regularmente. Por lo general, este sistema suele instalarse en hogares modernos o en apartamentos y cuenta con muchas ventajas, como la distribución uniforme del calor, el control de temperatura y la eficiencia energética.

Este último punto es clave. En general, los sistemas de calefacción central son más eficientes energéticamente en comparación con otras formas de calefacción, como estufas o radiadores independientes. Están diseñados para calentar grandes espacios de manera más eficiente, lo que puede traducirse en un menor consumo de energía y, en consecuencia, en cuentas bajas.

Tipos de estufa

Si no se cuenta con presupuesto suficiente para utilizar calefacción central, el uso de estufas o radiadores siempre es una muy buena alternativa para calentar habitaciones específicas. Vale destacar que existen muchos modelos diferentes de estufas en el mercado, por eso se deben realizar compras inteligentes, analizando todas las aristas posibles

Por ejemplo, una estufa a leña es un modelo más tradicional y utiliza la combustión de la madera como fuente de calor. Son eficientes en la generación de calor y proporcionan un ambiente acogedor. Pero se debe analizar, en primer momento, la normativa ambiental vigente sobre el uso de este tipo de calefacción en determinadas zonas del país, además de tener en cuenta que requieren de un espacio para almacenar leña, una salida de humos adecuada, entre otras cosas que no se pueden pasar por alto.

Otra opción con muchísima demanda en épocas invernales es la estufa a pellet. Estas funcionan con pellets de madera comprimida, que se alimentan automáticamente. Se trata de una opción más limpia en comparación con las estufas de leña, ya que la combustión es más controlada y producen menos residuos hacia el ecosistema. Este tipo de calefacción también requiere estudiar la normativa ambiental vigente sobre su uso en determinadas regiones.