Las “dos almas” en el Frente Amplio que complican a Gabriel Boric

La tarde del martes había un acuerdo entre los constituyentes del Frente Amplio para apoyar a Fernando Atria como uno de los coordinadores del bloque opositor en la Convención. Sin embargo, poco antes de la votación se le comunicó que un sector podría apoyar a un PC o incluso a un hombre del PS, cercano a RD.  Ese socialista, era su par Ricardo Montero, el ex jefe de gabinete del DC Jorge Burgos en el Ministerio del Interior de Bachelet.

Atria, señalan en Apruebo Dignidad, obtuvo sólo 3 votos de los 18 votos del Frente Amplio. La decisión generó un álgido debate dentro del bloque que apoya la candidatura presidencial de Gabriel Boric, aún cuando el frenteamplismo consiguió cuatro coordinaciones de las comisiones que elaborarán los contenidos de la nueva Carta Magna.

Uno de los factores de la decisión fue porque el PC consideraba “moderado” al Atria (ex PS).  Los votos frenteamplistas se dividieron entre Alondra Carrillo, Ricardo Montero y Rosa Catrileo. Un sector de los partidos Comunes y Convergencia Social reprochó a Fernando Atria, presidente del partido en formación Fuerza Común. Una suerte de articulación con el PS por sobre los acuerdos de Apruebo Dignidad

El hecho hizo resurgir un viejo debate. Lo que en el sector denominan las dos almas del FA : una de “hijos de la Concertación” y otra “ más de izquierda autónoma”.

Los Apruebo Dignidad señalan que sectores cercanos a Boric en la Convención “no responden a la lógica política nacional debieran tener mayor cercanía con Chile Digno, sino que están más pendientes de las presidenciales y de alianzas con los socialistas”.

Las “dos almas” frenteamplistas

“El Frente Amplio tiene dos almas muy similares a las que tuvo la Concertación. Una de izquierda y una más bien socialdemócrata que ha se perfila como la principal fuente de roces al interior del bloque y también entre el FA y el PC. Ese es un tema complejo en la campaña presidencial”, señalan en Comunes.

En Comunes, Convergencia Social y RD explican qué hay un sector mayoritario que proviene del mundo universitario, versus otro que pertenece al mundo popular. Lo mismo reconocen en Nuevo Trato y en el PC. Sostienen que es una de las debilidades del abanderado presidencial Boric que han pasado desapercibidas.

La polémica ex vocera de Ukamau y la visita a Maduro

Según manifiestan en el sector, el eje más de izquierda proviene de un sector de Comunes y de CS. Entre los primeros destacan la influencia de Doris González y Karina Oliva. También de la diputada Claudia Mix.

Mencionan que generó fricciones en el bloque Doris González, vicepresidenta de Comunes y ex vocera de del Movimiento de Pobladores Ukamau, la visita que en 2019 realizó al dictador venezolano Nicolás Maduro en Venezuela. En la ocasión posó abrazada con Maduro en fotografías que se diseminaron en los chat del pacto, además de declaraciones a su favor. La dirigenta hoy es parte del comando del candidato presidencial y en septiembre lo  representó en el sorteo del debate televisivo.

“Es claro que las chilenas y los chilenos no quieren la continuidad de este mal gobierno de Piñera y también, más aún, que la mitad de la gente todavía no sabe por quién votar. Ahí está nuestro desafío, hacia esas personas, para convocarlas, para recobrar la confianza, para sumarlos a este proyecto colectivo que está llegando a todos los rincones de Chile”, afirmó hace algunas semanas comentando una encuesta.

Un chat difundido en la oposición recuerda un violento mensaje que atribuyen a un sector de la que forman de la Mesa de Unidad Social donde menciona a Ukamau en las manifestaciones del 18-O. “Atención a todos, se informa para el mañana (18) gran despliegue del lumpen en todo con la intención de causar daño y sembrar más miedo. Varios movimientos ya están en cercanías de metros. Se pide permanecer en sus casa temprano tomando las medidas correspondientes, la calle quiere volver a ganar terreno y grupos como Ukamau están operando”, señala el registro.

Una áspera relación entre Boric y Oliva

También mencionan a la candidata a senadora por la Región Metropolitana Karina Oliva y ex vocera del Frente Amplio. Incluso, señalan que Boric ha buscado tomar distancia de ella en la campaña senatorial porque lo representaría más “el feminismo de Claudia Pascual (PC)”, también postulante.

Para la última elección de concejales Karina Oliva apoyó a su correligionario Rubén Urrutia en La Pintana, pese a saber que existían denuncias de violencia intrafamiliar en su contra. “Eso fue un problema en Comunes y en todo el Frente Amplio, porque era impresentable que ella supiera de sus denuncias”. Del mismo modo, relatan el apoyo que dio Oliva a la campaña a edil por Concepción de Camila Polizzi, que se opuso al aborto libre que promueve el feminismo de Boric.

Otra controversia fue cuando recibió apoyo de Pablo Maltés en la segunda vuelta de las elecciones a la Gobernación de Santiago, la pareja de la diputada Pamela Jiles (ex PH). Eso incluso provocó un áspero comentario de Boric. “Yo no aceptaría ese apoyo ni por un millón de votos”, espetó el abanderado.

En privado, comentan en el pacto de Boric, Comunes reprocha la ausencia del Boric en el debate en La Araucanía luego de que horas antes hubiera confirmado su participación.

Matices dentro en el partido de Boric

En menor medida afirman que esto se repite en un sector del mismo partido de Boric, quienes provienen de la corriente “izquierda libertaria” de Convergencia Social. Boric no milita en este sector, sino en los “autonomistas” también llamados “desbordar lo posible”. El sector libertario es liderado por la diputada Gael Yeomans (ex PC) y la presidenta del partido Alondra Arellano, aunque en la colectividad advierten de que se cuidan de hacer sus diferencias fuera de la tienda.

De hecho, entre los dirigentes de CS se cuestiona una serie de votaciones de la Convención Constituyente donde los 10 RD y Viera votan en acuerdo con el PS y no con el resto del pacto. En la mesa reconocen que lo de Atria generó controversia y que grafica las diferencias sobre visiones de país y de alianzas. Aunque prefieren no profundizar. Otros dirigentes explican que “no vieron la votación, porque están en campaña”.

El lote de los “hijos de la Concertación”

En contraposición a estas corrientes, explican que su némesis radica en el sector considerado “hijo de la Concertación”, donde mencionan a RD y Unir.

Militantes de RD explican que como se encuentra el bloque disputando la elección presidencial, es democrático, “en la apuesta de Apruebo Dignidad por entroncar sus posiciones en la constituyente sin  dañar la candidatura de Boric, hacer gestos y reforzar sus atributos de gobernabilidad”.

Otros, van un paso más allá. “La mayoría nosotros vemos que el Frente Amplio no hay cuadros que sean proletas, indígenas o dirigentes poblacionales, su base social sigue siendo la universidad. La crítica es que sin base social, esto es como un Techo Para Chile. En el FA es muy minoritaria la presencia de sectores populares fuera de Comunes o PODER, hay muchos “zorrones” que aspiran sólo al Congreso. Pero esto es política”, señala un convencional.

“Cuando en la CC, Elisa Loncón tuvo que suspender la sesión, fue porque los que venimos del mundo más popular y los del mundo indígena no aguantamos que los 2/3 rigiera para cosas de los pueblos originarios. Muchos eran del Frente Amplio, no era solo la machi Linconao”, señala otro dirigente.

En PC y los 4 convencionales de Comunes y CS hicieron ver al FA “más socialdemócrata” en distintas reuniones su molestia con el rechazo de Atria a los plebiscitos, antes de conversar una salida o buscar un acuerdo. De acuerdo con varios consultados, el mismo primer día, había sido por votar con el PS por Loncón y Bassa, en vez de apoyar a Bárbara Sepúlveda (PC) para presidir la mesa.