La triste muerte de querido personaje de Hijos del Desierto que impactó a televidentes
El joven actor que interpretó este rol en Hijos del Desierto se despidió en redes sociales con un particular mensaje.
Una bala en el abdomen acabó con la vida de este querido personaje de Hijos del Desierto. MEGA.
Hijos del Desierto, teleserie nocturna de Mega, vivió un especial capítulo la noche de este lunes, donde despidieron a uno de los personajes más queridos de la trama que se ambienta en el Valparaíso de la década de 1930.
Todo comenzó la semana pasada cuando tras la muerte del Monseñor Luco (Hernán Lacalle), el gobernador Hipólito Cárdenas (Rodrigo Soto) aprovechó que la banda de Pedro (Gastón Salgado) había bajado la guardia y contrató a un par de sicarios para que fueran a atacarlos.
De esta forma, a la cantina donde se reunían fue el escenario de una balacera que dejó a dos personas heridas. Por un lado, “El Negro” (Michael Silva) había sido herido a bala en la espalda, mientras “El Piojo” (Simón Beltrán) recibió un balazo en el abdomen.
Hasta el lugar llegó Eloísa (María José Weigel), quien rápidamente se encargó de atender al menor herido. Pero pese a sus esfuerzos, le fue imposible salvar su vida y murió producto de la grave lesión que sufrió, golpeando duramente a la banda de delincuentes de Hijos del Desierto.
Simón Beltrán despidió a su personaje en Hijos del Desierto
El joven actor Simón Beltrán, quien interpretó a “El Piojo” en Hijos del Desierto, hizo una publicación en su cuenta de Instagram donde se despidió de su personaje y destacó que era primera vez que lo mataban en una ficción.
“Nunca me había tocado despedir así a un personaje, y es muy triste e injusto. Porque la muerte del Piojo no es tan lejana de la realidad, aún existen niños que están desprotegidos, vulnerables y sin oportunidades”, señaló el adolescnete.
Por lo mismo, el joven actor de Hijos del Desierto espera que “eso cambie y nos hagamos responsables como sociedad y por sobre todo el Estado los cuiden como corresponde. Adiós Piojo”, cerró.
