Piñera aseguró que el Gobierno “no tomará ninguna medida que pueda perjudicar al pueblo de Paraguay”
"He pedido al ministro de Relaciones Exteriores que llame a nuestro embajador en Paraguay a consultas en nuestro país para poder contar con toda la información necesaria", dijo Piñera en una declaración a la prensa en el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo.
El Gobierno chileno llamó a consultas a su embajador en Paraguay, Cristián Maquieira, para tener más antecedentes sobre la destitución del presidente Fernando Lugo, según anunció hoy el presidente Sebastián Piñera.
“He pedido al ministro de Relaciones Exteriores que llame a nuestro embajador en Paraguay a consultas en nuestro país para poder contar con toda la información necesaria“, dijo Piñera en una declaración a la prensa en el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo.
El presidente no especificó si el Gobierno reconocerá al nuevo mandatario paraguayo, Federico Franco, y señaló que fijará su postura después de la reunión de presidentes de la Unasur que se celebrará “en los próximos días”, aunque no dio más detalles de esta cita.
“En los próximos días nos vamos a reunir los presidentes para, a la luz de los hechos ocurridos en Paraguay y tomando en cuenta los protocolos de defensa y protección de la democracia que contempla tanto el pacto del Mercosur como de Unsaur, tomar las medidas que correspondan”, indicó.
Piñera reconoció la validez del mecanismo político que dio paso a la destitución de Lugo, aunque consideró que “no se cumplieron ni se respetaron las normas del debido proceso y del legitimo derecho a defensa que están contemplados en la propia Constitución de Paraguay y también en el derecho internacional”.
El mandatario anticipó que el Gobierno chileno “no tomará ninguna medida que pueda significar un perjuicio para el pueblo del Paraguay.
Sin embargo subrayó que tomará “todas las medidas” en el marco de los acuerdos de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Mercosur para “defender y proteger la democracia” en América Latina.
El presidente paraguayo fue destituido el viernes de su cargo, después de que el Senado de este país lo declarara “culpable” de mal desempeño en sus funciones al frente del país.
Lugo fue reemplazado por el vicepresidente, Federico Franco, al que los gobiernos de Argentina, Ecuador, Bolivia y Venezuela anunciaron que no reconocerán por considerar que ha llegado a la presidencia mediante un “golpe de Estado”.