Universidades privadas en la Confech: la apuesta de la Jota para recuperar terreno
Antes de marzo, los universitarios definirán si aceptan o no el ingreso de las instituciones privadas a la Confederación de Estudiantes de Chile en busca de mayor representatividad. Un proceso que el PC mira con buenos ojos pues ha logrado el control de varias de estas casas de estudio, lo que podría reordenar el mapa político del movimiento luego de las derrotas Vallejo y Ballesteros en la Fech y la FeUsach.
La noche de viernes 16 de diciembre, Camilo Ballesteros y Patricio Indo caminaron en silencio por el barrio Lastarria. Los militantes de la Jota y respectivos presidentes de las federaciones de estudiantes de la Universidad de Santiago y de la Universidad Diego Portales, acababan de conocer los resultados en las elecciones de la Feusach. Con el tercer lugar en las votaciones, la Lista A quedó fuera de segunda vuelta y con eso, las Juventudes Comunistas perdían su segunda federación de estudiantes en Santiago.
La primera derrota había sido el pasado 7 de diciembre, cuando el egresado de Derecho, Gabriel Boric, desplazó a la vicepresidencia de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile a Camila Vallejo, desdibujando el mapa político al interior de la Confech.
Durante los siete meses del conflicto estudiantil -evidentemente- la Jota gozó de una visibilidad mayor al tener en la vocería a dos figuras emblemáticas como Vallejo y Ballesteros. Pero eso tuvo costos y el partido que dirige Guillermo Tellier no fue inmune a las críticas que surgieron desde los sectores independientes de izquierda, que acusaron un intento de politización del movimiento en función de los intereses del PC. Y el resultado de ese proceso fue justamente la pérdida del control de dos federaciones clave como son la Fech y la Feusach.
Sin embargo, tras la última sesión de la Confech abrió una nueva ventana para el PC. Allí se acordó debatir de forma definitiva el estatuto y con eso el ingreso de las federaciones de establecimientos privados-, donde desde hace un par de años la Jota realiza trabajo de base y donde ha comenzado a ganar presencia.
Un ejemplo es la Federación de Estudiantes de la Universidad Diego Portales, UDP, que por segundo año consecutivo elige a un presidente de la Jota. El presidente saliente, Patricio Indo, confirma que “vamos a hacer la solicitud de ingreso a la Confech” ya que que hoy existe una “voluntad para democratizar los espacios”.
Indo es además el encargado de las universidades privadas de las Juventudes Comunistas y explica que “más que una arremetida” de la Jota en el Confech por medio de las federaciones de universidades privadas, “es buscar esos espacios en vista a que se perdieron algunos” , dice.
Además de la UDP, también harían la solicitud de ingreso al Confech, la Universidad Bernardo O’Higgins y la Universidad Santo Tomás, todas con militantes de la Jota al interior de sus directivas, luego de las elecciones que se realizaron durante diciembre.
“Hemos trabajado de cerca durante todo el año con los estudiantes de la Universidad Diego Portales, de la Adolfo Ibáñez y la de Humanismo Cristiano, quienes se han mostrado abiertos a participar en la Confech”, agrega el presidente de la Federación de Estudiantes dela Universidad Católica, Noam Titelman.
En total serían ocho federaciones las que podrían ingresar a la Confech hasta marzo, reordenando nuevamente el mapa de las fuerzas políticas, todo esto si es que se aprueba su ingreso en el próximo Congreso que realizarán los universitarios.
Las privadas en la Confech
De las 32 universidades privadas que existen hoy, solamente la Universidad Central participa con voz y voto en la Confech, luego de que la mesa ejecutiva los notificara de su ingreso, tras cumplir con una serie de requisitos que fueron definidos como “provisorios”.
Estos criterios fueron establecidos en la reunión de los universitarios realizada en Magallanes, el pasado 23 de julio, y entre ellos está contar con una federación democráticamente electa, sin la intervención de las autoridades y tener un estatuto propio.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Central, Daniela López, cree que el ingreso de su universidad a la Confech “es el primer gran paso para poder democratizar la plataforma que es la Confech, que tiene un peso muy importante, pero que lamentablemente es elitizada y sesgada”.
“Como hoy la Confech no tiene estatuto que la rija, se verá si es representativa o no y si , por ejemplo, se realiza voto ponderado dependiendo de la cantidad de alumnos y sedes. Pero eso no solo con el ingreso de las privadas, sino que también se espera discutir sobre qué pasa con las privadas tradicionales como la Católica”, explica el miembro de la mesa ejecutiva de la Confech y vice presidente de la universidad del Biobío, Gastón Urrutia.
No a las privadas
Al interior de la Confech existen diferentes visiones sobre el ingreso de las privadas. Además de un gran sector que está de acuerdo con la inclusión de estas instituciones, hay grupo que las mira con recelo, debido al aumento de militantes de las Juventudes Comunistas, intentando lograr la mayoría al interior de la Confederación de Estudiantes de Chile. “La Jota necesita votos, por lo que seguirán insistiendo con su ingreso incluso si es más complicado trabajar por la cantidad de gente”, explica un dirigente universitario.
Asimismo, el vocero de la Confech y líder de los estudiantes de la Universidad Federico Santa María, Alexis González, advierte que “hay que tener cautela” para lograr que no ingresen federaciones de estudiantes “que responden a conglomerados políticos que se articularon para entrar en esos espacios, como lo que pasó en mi universidad, donde tendencias políticas de derecha, de las juventudes de Renovación Nacional, reclutaron gente y se les hicieron seminarios de líderes solamente para que improvisen federaciones”.
Otro punto que se discute entre los universitarios es que “las universidades privadas no tienen la experiencia suficiente en el trabajo estudiantil, por lo que primero tienen que organizarse y trabajar como un organismo distinto para luego trabajar en conjunto”, dice Laura Palma, representante de la universidad de La Serena.
Otra punto que esta pendiente de resolver es definir la representatividad y derecho a voto que tendrán las universidades privadas en caso de ser aceptadas en el Confech. Gastón Urrutia, miembro de la mesa ejecutiva del órgano estudiantil, explica que “por ejemplo en la Universidad San Sebastián se realizan los procesos pertinentes para asegurar una participación real de los estudiantes, pero ¿cuántas sedes tiene? Quizás hay que pensar en confirgurarlo como un espacio más federativo, agrupando privadas, privadas tradicionales, etc”.
Daniela López, autonomista y presidenta de la única privada de la Confech, asegura que las presiones vienen de “sectores de ultra izquierda que señalan que somos los estudiantes más beneficiados porque estamos en una privada, cuando no está entendiendo la complejidad mayor, ya que somos nosotros los que estamos súper endeudados y sus instituciones son más elitizadas que las nuestras”.
Trabajo de largo aliento
Pese a que reconocen que sería una buena oportunidad para lograr equiparar el mapa político dentro de la Confech, al interior de las Juventudes Comunistas aseguran que el trabajo con los estudiantes de las universidades privadas se realiza hace unos tres años.
Según Camilo Ballesteros, la Jota tiene “presencia en las universidades privadas ya que son un sector excluido, que sus demandas no se han tomado en cuenta y que hoy se pueden fortalecer”y aclara que el Congreso donde se definirá el ingreso de las universidades privadas a la Confech “se zanjó cuando aún no teníamos presencia en estos espacios”.
Indo señala que “no sabíamos que íbamos a perder la Feusach y la Fech y, claro, hay varias federaciones que podrían en algún momento establilizar las fuerzas políticas de la Confech y obviamente vamos a pretender eso”.
Ballesteros advierte que “una de nuestras debilidades del año fue excluir a actores del movimiento estudiantil. Hoy las universidades privadas logran organizarse y es necesario incorporarlas a la mayoría y no de manera simbólica, sino de manera que te permita una proyección más potente y permita generar una movilización más fuerte”.