Garzón asegura que Pinochet no tenía impedimentos de salud para afrontar juicio en Inglaterra
Afirmó además que el retorno del dictador a Chile "fue una decisión política dentro del marco de la ley de extradición" y que su llegada al Aeropuerto, cuando se puso de pie y levantó su bastón, le dejó "una sensación de disgusto y pena por las víctimas".
El ex juez Baltasar Garzón, de visita en Chile por con motivo del Congreso del Futuro, recordó pormenores de la detención de Augusto Pinochet en Londres, en el marco de su investigación del “Plan Cóndor”, que abarcaba a varias dictaduras latinoamericanas.
Aseguró que “los informes médicos que se hicieron en España (a Pinochet) mostraban que no había tal imposibilidad e incapacidad para afrontar el juicio”.
Afirmó que el retorno del dictador a Chile “fue una decisión política dentro del marco de la ley de extradición” y que su llegada al Aeropuerto, cuando se puso de pie, le dejó “una sensación de disgusto y pena por las víctimas”.
Consultado en Cooperativa por su suspensión del poder judicial español durante el año pasado por iniciar una investigación sobre el régimen de Franco, afirmó que la derecha, tanto en Chile como en España se alegraron, pero que la labor que ha realizado va de acuerdo con la existencia de “un sentido de la jurisdicción universal, que no hemos inventado los jueces”.
“Es una norma aprobada por diferentes parlamentos y recogida en instrumentos internacionales, justamente para que no haya impunidad, dificultades o imposibilidad en el país respectivo ante crímenes de lesa humanidad, genocidio, tortura, etc.”, explicó Garzón.
El juez, que defiende actualmente a Julian Assange, aseveró que gracias a Wikileaks “se han revelado una serie de situaciones que distan de la acción diplomática adecuada, también acciones de empresas y violaciones graves de derechos humanos. Eso no puede ser nunca delictivo”.