Cuatro frases de Roberto Angelini que explican "lo difícil que es" ser empresario hoy en Chile
El líder de ese holding hace un llamado a restablecer la búsqueda de acuerdos y a poner el crecimiento como una prioridad para el país.
Roberto Angelini es la novena fortuna del país, de acuerdo al ránking de la revista Forbes. Con 67 años, el presidente de Empresas Copec suma un patrimonio de US$1.200 millones, cargo que asumió su cargo luego de que su tío, Anacleto, falleciera en 2007.
En esa posición, además, Angelini ha debido declarar en calidad de testigo ante la fiscal Ximena Chong en el marco del caso Corpesca, causa que indaga eventuales delitos de cohecho, lavado de activos y soborno mientras se tramitaba la Ley de Pesca.
En ese contexto, el líder de ese holding -en entrevista a Diario Financiero– hace un llamado a restablecer la búsqueda de acuerdos y a poner el crecimiento como una prioridad para el país. No solo eso: Angelini también habló de lo “duro” que es ser empresario e inmigrante y explicó cómo debe ser un hombre de negocios.
Éstas son algunas de sus frases más destacadas:
“Hoy es duro ser empresario. Es cuestión de ver la televisión y leer los diarios. Es un rol que está muy castigado y vilipendiado”.
“Uno está en continua autoevaluación, viendo permanentemente en qué pude equivocarme para arreglarlo. Aquí por lo menos siempre revisamos críticamente lo que hacemos para identificar en qué podemos mejorar. Evidentemente, siempre vamos a encontrar errores porque somos seres humanos, lo importante es poder corregirlos y en eso estamos siempre trabajando”.
“Nosotros somos inmigrantes, para tocar un tema sensible por estos días. Yo no nací en Chile pero hoy este es mi país. En 1957, cuando empezamos con las primeras actividades importantes a nivel industrial, recuerdo que mi padre, al instalar en Arica la primera planta pesquera de Eperva, se encontró con una ciudad que carecía de equipamiento básico, razón por la cual junto con la instalación de la planta, lo primero que hizo la empresa fue construir casas para los trabajadores, a muchos de los cuales reclutó ofreciéndoles una alternativa laboral a la vida de excesos que llevaban, algo que a los pocos años ellos le agradecían”.
“No es tanto talento (ser hombre de negocios), hay que ser una persona de esfuerzo y tener grandes colaboradores. Si bien, lo nuestro siempre ha sido lo industrial, nuestro principal activo son las personas”.