El Arzobispado de Santiago anunció la creación de la “Delegación Episcopal para la Verdad y la Paz”, que estará encargada de atender las denuncias de abusos, acompañamiento de víctimas y promoción de ambientes sanos.
La instancia a su cargo las labores que realizan actualmente la Oficina Pastoral de Denuncias (OPADE), y el “Departamento de Promoción de Ambientes Sanos”.
La nueva Delegada Episcopal para la Verdad y la Paz será la abogada Andrea Idalsoaga Montoya, quien reportará directamente al Arzobispo de Santiago.
El organismo tiene el objetivo de enfrentar el daño producido por los abusos causados por miembros de la Iglesia en la arquidiócesis, responder a las necesidades actuales y construir caminos para reestablecer la confianza.
Además, coordinará las denuncias, acompañará a las víctimas, realizará las investigaciones pertinentes y colaborará con las instituciones civiles en materias competentes.
