Chile registra la natalidad más baja en una década: qué razones y riesgos hay tras esta decisión
Dos expertos conversaron con EL DÍNAMO sobre las cifras entregadas por el INE y el Registro Civil y los efectos que podría producir que esta tendencia se mantenga.
Datos y estadísticas del país demuestran que Chile está presentando una baja natalidad. Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y el Registro Civil, los nacimientos registrados durante el 2023, los cuales fueron, es la cifra más baja después de una década.
La pandemia evidencia aún más la caída de estos números, dado que en los primeros ocho meses del 2022 se registraron 91.224 nacidos, siendo que en el 2021 hubo 177.306.
Si bien en el 2023 se revirtió la cifra del año anterior con solo 173.920 nacidos, es considerada la cifra más baja después de una década.
Marcela Puentes, directora de la Escuela de Obstetricia y Neonatología de la Universidad Diego Portales (UDP), explica que estamos en un sistema en donde las personas quieren ascender socialmente.
“Las mujeres nos dimos cuenta que al tener hijos tenemos menos acceso a trabajo, trabajos más precarizados, perdemos espacios laborales y hace que nuestra posibilidad de realización desde el punto de vista académico, monetario, económico se ve mermado“, explicó a EL DÍNAMO.
Por otro lado, Mauro Basaure, profesor titular de Sociología de la Universidad Andrés Bello (UNAB) e investigador del Centro de Estudios de Conflicto y Copesión Social (COES), dijo que otra causa se debe a un factor económico que no depende de la persona misma.
“Depende también de lo que ofrece el Estado, las instituciones o las empresas para que las mujeres puedan acceder a sistemas de cuidado. En otros países existen medios de apoyo por cada hijo, donde se recibe un pequeño sueldo, como en Alemania”, indicó.
Es decir, “esto tiene dos dimensiones. Por un lado, tú situación financiera, pero también lo que te ofrece el mercado, por ejemplo, si en la empresa haya sala cuna o no tener el miedo de que te vayan a despedir“, agregó el experto.
Consecuencias de la baja natalidad: el envejecimiento de la población
En el caso que no exista una natalidad estable podría traer como consecuencia el no tener una tasa de recambio real.
“Esto sucede desde el año 1999, 2000, en donde ya no estamos bajo de la tasa de recambio, que es una tasa de fecundidad menor a 2.1. Nosotros tenemos alrededor de 1.50 y desde 1999 que esto ya no ocurre”, explicó la directora de la Escuela de Obstetricia y Neonatología de la UDP.
El que no estemos bajo esta tasa significa que, como población, al igual que en los países en desarrollo, comenzaremos a envejecer.
“Estamos viviendo cada vez más, entonces la sociedad se envejece cada vez más. Y esto, tiene una cantidad enorme de consecuencias“, dijo Mauro Basaure haciendo énfasis en las secuelas posteriores.
Una de ellas, explica el profesor titular de Sociología de la UNAB, es que mientras más edad tengan las personas, habrá una mayor necesidad de cuidado y apoyo, así mismo, una menor población joven que se haga cargo.
Por otro lado, también habrán más personas necesitadas de pensión y menos personas productivas que mantengan la riqueza del país.
Y, por último, dado que los adultos mayores tienen más problemas de salud habrá una sobrecarga en el sistema.
“A largo plazo es un problema de todas las sociedades modernas, es un tremendo tema que debiese estar mucho más en la palestra. Ya que, son todas crisis“, explicó.
Además agregó que “crisis de cuidado, significa que no hay quien cuide a tanta gente mayor. Crisis de salud, no hay como atender a tantas personas mayores con enfermedades crónicas. Crisis del sistema de pensiones, más pensionados y menos personas productivas que mantengan la riqueza del país. Todo es un tema muy serio”.