Impuestos al petróleo y al carbón: la reforma verde que prepara el Gobierno y que adelantó la ministra Maisa Rojas
Alza al impuesto al petróleo, un tributo específico al combustible del transporte aéreo y de buques mercantes, aumentos a empresas a carbón son algunas de las medidas de la denominada Reforma Tributaria Verde que el Gobierno espera presentar.
Alza al impuesto del petróleo, principalmente en industrias, un gravamen específico al combustible del transporte aéreo y de buques mercantes, y a empresas que operen a carbón son algunas de las medidas de la denominada Reforma Tributaria Verde que el Gobierno espera presentar a fines en mayo.
Aunque esta mañana la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, se desdijo de su afirmación, emitida en una entrevista en Emol, sobre un alza del impuesto específico al diésel que trabaja el su cartera junto a las de Hacienda, Energía y Transporte, en el Ejecutivo confirman que se prepara una batería de “impuestos verdes”.
Según los planes de los Ministerios mencionados por la ministra Maisa Rojas, se modificará el actual sistema de impuestos verdes u orientados a los elementos contaminantes y se incluiría un alza al precio al diésel, aunque no se ha definido si incluiría también a los automóviles particulares o solo a algunos tipos de transporte.
De hecho, hasta finales de abril hay plazo para que los contribuyentes afectos al impuesto verde de contaminación por fuentes fijas informen al Ministerio de Medio Ambiente sus emisiones de partículas contaminantes actualizadas y, así, verificar o recalcular el tributo que deben pagar.
Dicha resolución fue una iniciativa de la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, que trabajó con su par de Hacienda Mario Marcel. No son los únicos impuestos verdes que se preparan en el Ejecutivo.
Impuesto Verde al CO2
En la actualidad, Chile tiene tres impuestos a las emisiones de fuentes móviles y de fuentes fijas, que fueron incluidos dentro de la Reforma Tributaria de 2014 y en la Ley 20.899 de 2016, durante el Gobierno de Michelle Bachelet.
El primero apunta a vehículos livianos nuevos; el segundo es para fuentes fijas y grava emisiones de óxido nitroso (material particulado (MP), y dióxido de azufre (SO2), que afectan la salud de la población.
El tercero, también aplicado a las fuentes fijas, es un impuesto directo a la emisión de dióxido de carbono (CO2), el principal contaminante global y responsable del cambio climático. Este último se busca aumentarlo de forma significativa.
A fines de este mes, el Ejecutivo podría ingresar el proyecto de ley que aumenta de forma gradual el impuesto a las emisiones de CO2 y un nuevo reglamento de compensación de emisiones que entregaría beneficios a las empresas que opten por el uso de combustibles menos contaminantes.
Restricciones y fiscalización a termoeléctricas
Otro de los proyectos de reforma a los impuestos verdes en los que se trabaja son restricciones a termoeléctricas según el uso de carbón o índices contaminantes y a empresas que usen petróleo para la producción.
“En mayo posiblemente esperamos la implementación de una red de monitoreo de calidad de aire, compuesta por 14 estaciones, como parte de una red pública en la zona de Concón, Quintero y Puchuncaví. Se trabaja también en una nueva norma de calidad para emisiones de arsénico y un sistema mejor de fiscalizaciones de las normas de emisión de fundiciones y termoeléctricas”, señala a EL DÍNAMO una fuente que participó en los impuestos verdes.
Otro de los planes que el Ejecutivo trabaja, aunque con menos prisa y luego de los anuncios relacionados con la Empresa Nacional del Litio, sería la creación de una Empresa Nacional de Hidrógeno Verde para el desarrollo del H2 verde en el país.
“Esperamos un impuesto, sea realmente verde y que contribuya a desincentivar las emisiones, tanto por los problemas locales como hemos visto estos días en Quintero y Puchuncaví, donde hay graves afectaciones a la población y la salud”, expresó la ministra Maisa Rojas a mediados de 2022 en un encuentro en la Fundación Chile Sustentable, sobre impuestos verdes.