Las redes que sostienen al embajador Javier Velasco en España y el mea culpa que realizó ante parlamentarios chilenos
Pese a las polémicas en las que se ha visto envuelto desde 2022, el militante de Convergencia Social ha generado una amplia red de contactos en su paso por Madrid, que incluye a empresarios, corporaciones, políticos de izquierda y derecha, y artistas. Este punto habría sido clave para que el canciller Van Klaveren optara por mantenerlo en su puesto.
Un almuerzo en un restaurante ubicado a pasos de la Embajada de Chile en España, en Madrid, fue el contexto escogido por el embajador Javier Velasco (CS) para referirse, este miércoles, a sus polémicas declaraciones en torno a la compra de armamento a “otros socios”, debido al deterioro de las relaciones con Israel por la guerra en Gaza.
Fue ante una comitiva transversal de parlamentarios ―integrada por seis diputados y cuatro senadores que van desde el PC hasta Republicanos― que el representante chileno decidió tomar la palabra. Según algunos presentes, Velasco comenzó agradeciendo por la visita, en la que los legisladores sostuvieron una serie de reuniones con el Gobierno y la Policía de España para avanzar en normas de inteligencia.
Luego, el embajador reconoció que “han pasado cosas, ha habido problemas” durante su gestión. Y agregó: “Yo lo hago lo mejor que puedo. El contexto de esas afirmaciones era otro, pero uno se puede equivocar”. Tras eso ―dice uno de los comensales―, explicó por qué, el 12 de junio, planteó que el conflicto en Medio Oriente “es una oportunidad para otros socios […]. ELS Industries, ITP e Indra se sentaron a pensar en cómo podría ser un futuro donde el sector israelí podría compartir espacio con otros socios”.
Rápidamente, mientras la delegación compartía una entrada con sopas y otros platos, el diputado Álvaro Carter (ind-UDI) le advirtió que “debería cuidarse” y lo llamó a evitar conflictos dada su amistad con el presidente Gabriel Boric. En tanto, el senador Iván Flores (DC) ―uno de los viajeros― comentó que es necesario dar vuelta la página y dejar atrás este tipo de polémicas. “Tomo sus palabras con humildad y las considero”, respondió Velasco.
El almuerzo —donde los presentes consumieron un menú cercano a los €15— fue el cierre de la breve visita que realizaron a la capital española, además de Carter y Flores, los senadores Paulina Vodanovic (PS), José Durana (UDI) y Kenneth Pugh (ind-RN), y los diputados Francisco Undurraga (Evo), Jorge Brito (RD), Carmen Hertz (PC), Leonardo Soto (PS) y Stephan Schubert (ind-Rep), que integran las comisiones de Defensa y Seguridad del Congreso.
Entre quienes participaron de la gira había algunos críticos de Javier Velasco, que manifiestan haberlo visto “achunchado”, contrariado e incluso asustado por la presencia de personeros de oposición. Pero, al mismo tiempo, valoran que el embajador es reconocido entre las instituciones españolas. “La gente lo conoce, lo recibe bien, lo trata por su nombre. Él hace su pega acá y está bastante a caballo de los temas, sabe de lo que estamos hablando, y tiene un muy buen trato”, señala un parlamentario.
Un legislador opositor confiesa que el funcionario diplomático “se comporta como un profesional. Quedé gratamente sorprendido, porque yo venía con bastantes menos expectativas, y me demostró que ha hecho su trabajo, independiente de las polémicas”.
El balance de la visita, según los parlamentarios, es positivo. En conversación con EL DÍNAMO, Schubert sostiene que “hemos estado con el embajador, que nos ha acompañado a todas las actividades del segundo y tercer día. Personalmente con él, salvo saludarnos muy cortésmente, no hemos hablado de otros temas, ni tampoco en particular del conflicto por sus dichos”.
“No le he tocado el tema porque creo que no corresponde, no soy su superior jerárquico ni su jefe. Tampoco soy quién para llamarle la atención o algo así. Salvo por sus propios comentarios, no he puesto el tema sobre la mesa”, insistió el independiente.
Undurraga, por su parte, comenta a EL DÍNAMO que “el embajador hizo su trabajo muy bien y nos acompañó en todo lo que se le solicitó compañía. En ningún caso monopolizó las conversaciones, sino que dejó que nosotros actuáramos preguntando y nos contestaran”.
En las empresas, la derecha y la cultura: los nexos que Javier Velasco ha construido en su paso por España
El 1 de mayo de 2022, el abogado Javier Velasco (38) asumió como embajador extraordinario y plenipotenciario en España. Desde el inicio de su gestión se propuso realizar una “transformación” en la relación diplomática entre ambos países, que data desde 1823. Esto, identificando los actores relevantes y los temas clave en los que Chile puede ofrecer valor.
Así, para Velasco —íntimo amigo y ex vecino del presidente Boric, a quien conoció en la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile—, un objetivo clave es generar alianzas estratégicas entre Latinoamérica y España para permear en Europa, comprendiendo al país como puerta de entrada al viejo continente. Con este principio, optó por priorizar, además del aspecto político, temáticas como las energías renovables, las aguas, la logística, el turismo y la infraestructura, teniendo en cuenta que el país ibérico es el tercer mayor inversor en Chile, detrás de Estados Unidos y Canadá.
Con eso en mente, el funcionario decidió potenciar las relaciones comerciales entre ambos países y, de la mano de ProChile, impulsó el Chile Summit Europa 2024. Este encuentro tuvo lugar en mayo pasado en la sede de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), un símil de la CPC. En el evento participaron representantes de más de 40 empresas españolas, chilenas, inglesas, finlandesas, suecas, alemanas e italianas, y se realizaron más de 100 reuniones para internacionalizar startups latinoamericanas.
Además de su fluida relación con la CEOE y con empresarios ligados a la innovación, Javier Velasco ha trabajado muy de cerca con la Fundación Chile-España (FCE). Esta institución, que se define como “empresarial y privada”, fue fundada en 2011 mientras Sergio Romero (RN) ejercía como embajador, y tiene como objetivo “incrementar el intercambio económico, cultural, académico-científico y social entre Chile y España”. Esto, mediante “actividades que fomenten la cooperación, el intercambio de experiencias, las oportunidades de inversión y negocio, el emprendimiento y la innovación tecnológica”.
A un año de haber asumido su cargo en Madrid, Velasco participó en una actividad organizada por la FCE y la Cámara Española de Comercio en Chile (Camacoes). Ahí, sostuvo que “estoy muy contento de estar en este evento […] y entregar palabras sobre algo tan importante como la cooperación público-privada, que se hace carne no solamente en los datos macroeconómicos […]. El impulso público-privado construye relaciones humanas significativas y oxigena nuestros mundos empresariales y nuestros mundos públicos”.
“Qué más gráfico que eso que el vínculo que hemos hecho con la Cámara de Comercio y la Fundación Chile-España. A mí me toca tener el placer, el honor, de compartir este trabajo de vincular en términos público-privados a nuestros países, con dos grandes amigos, que son María Ángeles y Miguel Ángel, a quienes mando un gran saludo […]. El futuro de nuestra relación bilateral está en buenas manos”, agregó emocionado.
Fue también junto a la FCE que Javier Velasco estrechó lazos con figuras como el ex alcalde Joaquín Lavín (UDI) —quien tiene una positiva visión del diplomático—. A fines de febrero, la fundación hospedó un desayuno-coloquio, que llevó por título “Tregua y Estrategia. El Desafío de Chile”, al que llegó el embajador. En él, Lavín y el sociólogo Alberto Mayol (ex FA) apuntaron a la necesidad de formar una alianza entre izquierda y derecha. Esto, con el fin de avanzar en mínimos comunes y apostar por la gobernabilidad, la educación, la apertura comercial y el desarrollo tecnológico.
Además de esa ocasión, Velasco ha tenido otros encuentros con el ex jefe comunal gremialista, quien reside algunas temporadas del año en Madrid, donde imparte clases sobre gobierno municipal en IE University. Entre los temas que ambos han conversado están la sustentabilidad y el cambio climático, y el papel del país ante esos fenómenos. “Chile puede salvar al mundo del cambio climático”, le habría dicho Lavín en más de una oportunidad.
En España ha cultivado, también, un vínculo cercano con el secretario general iberoamericano y ex ministro, Andrés Allamand (RN). El líder de Segib coincide constantemente en foros, seminarios y reuniones con el embajador y tiene una buena impresión de su trabajo diplomático. Una mirada similar tiene Velasco del rol que ha ejercido Allamand desde ese puesto. Consultado por EL DÍNAMO, el militante de RN declinó referirse a la gestión de Velasco.
Más de alguna vez, el militante histórico de Convergencia Social ha confidenciado a sus cercanos que una parte importante de quienes lo secundan en la embajada —ubicada en un edificio de calle Lagasca— son de derecha y ha asegurado tener una buena relación con ese sector político. Algunos parlamentarios con los que ha mantenido con contacto cordial y ha recibido en su oficina son el senador Juan Antonio Coloma (UDI), y los diputados Undurraga y Jorge Alessandri (UDI).
A ellos se suma el ex ministro Pablo Longueira (UDI), con quien se reunió en octubre pasado en su despacho. En conversación con La Tercera, Longueira relató que “tuvimos una larga conversación sobre el momento que vivía el país. Me sorprendió su profundidad de análisis”. Asimismo, ha generado lazos con personeros del Partido Popular (PP), referente de la centroderecha española, como su líder Alberto Núñez-Feijoó.
En materia cultural, en tanto, se le destaca por haber logrado que Chile fuese el invitado de honor al Festival Eñe 2024, una masiva instancia literaria que tendrá lugar en Madrid y Málaga durante noviembre próximo. Ha tendido redes, a su vez, con instituciones culturales como la Casa de América —a la que asiste recurrentemente—, el Instituto Cervantes y la Biblioteca Nacional de España.
Asimismo, de la mano del agregado cultural Germán Berger (PC), el embajador —que se considera un ilustrador de vocación— ha potenciado la internacionalización de artistas chilenos emergentes, entre los que están la ilustradora Catalina Bustamante (conocida como Cata Bu), la banda musical Flangr y la artista visual Javiera Paz Vial, a quienes ha acogido recientemente en la embajada. A su vez, junto a Berger, han promovido la divulgación de producciones como La Memoria Infinita y La Contadora de Películas, además de su participación en festivales europeos.
El historial de traspiés del amigo cercano del presidente Boric
Pocos meses después de que el presidente Boric lo nombrase embajador en España, Javier Velasco protagonizó sus primeras polémicas. En septiembre de 2022, realizó una ponencia en un foro en Madrid, que fue telefoneada por el líder de Podemos, Pablo Iglesias. El español introdujo a Velasco como “un amigo” que integra “una generación excepcional de jóvenes chilenos que supo leer los anhelos de transformación” tras el estallido social.
En su alocución, el embajador deslizó la responsabilidad a la Concertación y la Nueva Mayoría por las protestas que tuvieron lugar desde el 18 de octubre de 2019.
“Un estallido de esas dimensiones no es una cuestión baladí. Para que llegáramos a eso se requirieron 30 años de políticas que profundizaron la desigualdad, 30 años de un país percibiendo eso de forma cotidiana”, afirmó el abogado.
Sus palabras sacaron ronchas en el Socialismo Democrático, e incluso el ex presidente Ricardo Lagos salió a responderle. “No conoce los números […]. Espero que este señor sepa lo que es el índice Gini”, ironizó el ex mandatario. Boric, en tanto, optó por respaldarlo, apuntando a la prensa por “buscar la peor versión posible de una cuña en específico para tratar de armar un debate” y señalando que “estoy seguro que casi nadie vio el foro en el que participó el embajador”.
Días después, esa defensa se transformó en un llamado de atención, cuando se conocieron las fotografías que había subido a redes sociales junto a su pareja Manola Pérez. En una de ellas se veía al embajador en un auto oficial acariciando los pies de Pérez. A esa imagen se sumó un registro de ambos comiendo langosta en un restaurante.
La ex ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola (ind), tomó contacto con Javier Velasco y lo instó “al orden y la prudencia”. Después de eso, desde Cancillería le recomendaron evitar dar entrevistas y manejar con cautela la relación con la prensa.
El siguiente incidente ocurrió en febrero de 2024, cuando se ausentó de la recepción anual que el rey Felipe VI de España ofrece al cuerpo diplomático, y no envió ningún representante de la embajada. Relaciones Exteriores justificó la ausencia diciendo que Javier Velasco estaba de vacaciones, permiso que había pedido antes de recibir la invitación del monarca.
Pese a que el hecho abrió un flanco difícil de justificar para Velasco, sus cercanos plantean que ha tenido varias reuniones con el rey, con quien ha construido una buena relación. De hecho, en su cuenta de Instagram se registran imágenes de algunos encuentros que han sostenido —el último de ellos el 29 de mayo en los Premios Princesa de Girona 2024—. Un mes después, a pesar de los cuestionamientos, el embajador estuvo detrás de la visita del presidente del gobierno español Pedro Sánchez a La Moneda, que fue bien evaluada en el mundo político.
El último traspié, en tanto, pilló a Javier Velasco en el puerto andalúz de Cádiz, donde participó a mediados de junio en las celebraciones por los 70 años del Buque Escuela Esmeralda. Según un funcionario diplomático que quiso mantener en reserva su nombre, la polémica no llegó a España. “El tema está todo en Chile. El embajador ha seguido con sus actividades normales”, confidenciaba la fuente a EL DÍNAMO cuando se suscitó el conflicto por las declaraciones de Velasco.
El 14 de junio, el ministro de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren (ind), volvió a llamar al orden al diplomático. Además, le exigió que entregara un informe donde explicara los comentarios que había emitido dos días antes. Un día después, el embajador respondió a la solicitud entregando un documento de una página y media.
Finalmente, el 18 de junio, Cancillería optó por mantener a Velasco en su cargo. Fuentes ligadas al ministerio atribuyen esa decisión a dos razones: los tiempos y las redes. Los plazos, porque queda sólo un año y medio de Gobierno, y la designación de un nuevo embajador puede ser un proceso lento, a lo que se suman los transversales nexos que ha construido en su paso por el sexto piso del edificio de Calle Lagasca, en el barrio de la Castellana, en Madrid. Sin embargo, esta vez, no hay espacio para errores ni pasos en falso.