Dimes, diretes y la “nueva derecha”: las heridas que dejó la elección de la mesa del Senado
Acusaciones de traición y recriminaciones mutuas entre el oficialismo y Demócratas dejó la asunción de José García Ruminot (RN) a la testera del Senado.
Este martes la Sala del Senado vivió una verdadera “batalla campal” a la hora de elegir a la nueva mesa de la Cámara Alta, que terminó con José García Ruminot (RN) como nuevo presidente y acusaciones mutuas de traición por no respetar el acuerdo administrativo.
Esto, ya que el pacto alcanzado hace dos años atrás entre el oficialismo y Chile Vamos, sin la presencia de RN, apuntaba que tras la salida de Juan Antonio Coloma (UDI) de la testera, el cupo le correspondía a un integrante de la bancada PPD-Independientes, representada en esta oportunidad por Pedro Araya.
Pero eso no se cumplió y finalmente García Ruminot se convirtió en el sucesor de Coloma con apoyos de Chile Vamos y Demócratas.
El principio del fin del acuerdo administrativo
Todo esto, a raíz del conflicto originado por la nueva presidencia de la Comisión de Hacienda, ya que el acuerdo administrativo apuntaba a que el cargo debía ser dejado por Ricardo Lagos Weber (PPD) y dar paso a un DC, que al momento de sellar el trato era la senadora Ximena Rincón.
De este modo, al momento de conformarse la instancia parlamentaria, apareció Rincón para intentar hacer valer lo acordado hace dos años, a pesar de ahora ser parte de Demócratas.
Ante esto, desde la DC prendieron las alarmas y fue el senador y primer vicepresidente de la colectividad, Francisco Huenchumilla, quien aclaró que los cupos eran por partidos, no por personas, – en este caso la Democracia Cristiana- por lo que no correspondía que Ximena Rincón asumiera en la Comisión.
A pesar de los intentos para lograr superar este impasse, no se logró una resolución satisfactoria para la DC y Demócratas, echando por la borda el acuerdo administrativo y sepultando las opciones de Pedro Araya (PPD) de asumir como presidente del Senado.
La “nueva derecha”
La molestia del oficialismo se hizo sentir en plena votación, donde las recriminaciones hacia la gestión de Juan Antonio Coloma, por no salvar lo pactado hace dos años, y especialmente hacia Ximena Rincón y Matías Walker no se hicieron esperar.
Una de las parlamentarias que dejó ver su malestar fue la senadora Alejandra Sepúlveda (IND), que declaró durante la votación que “si hay algo que hemos aprendido quienes hemos estado en la Cámara es que los cuchillos se cruzan y se ven. En este Senado no se ven, pero se sienten en la espalda”.
Palabras más duras fueron las empleadas por su par DC Francisco Huenchumilla, quien encaró de manera directa a Matías Walker.
“El año 1938, Eduardo Frei Montalva con otros jóvenes renunciaron al Partido Conservador y se fueron de la derecha. Hoy día, 84 años después, en pleno siglo XXI, tú vuelves a la derecha. Retrocedes en la historia“, le espetó Huenchumilla.
El senador agregó que “lo siento mucho porque cuando ustedes se fueron de la DC, lo hicieron con un proyecto de centro y muchos camaradas los siguieron y hoy día ustedes pertenecen a la derecha“.
De este modo, apareció entre las filas del oficialismo la calificación de “nueva derecha” para la alianza Chile Vamos y Demócratas, como lo graficó Yasna Provoste (DC).
“La decisión de esta nueva derecha de desconocer los acuerdos es una situación compleja para la democracia y daña sin duda las confianzas, por tanto, el camino de recomponer aquello será un camino largo”, puntualizó.
Ante los emplazamientos, Ximena Rincón apuntó como responsables del fracaso de la elección de la mesa del Senado a la Democracia Cristiana, y especialmente a Francisco Huenchumilla, asegurando que ellos no respetaron la palabra empeñada.
Los “heridos” que dejó la polémica
Uno de los alcanzados por el daño colateral dejado por el rompimiento del pacto administrativo fue el senador Felipe Kast (Evópoli).
Esto, ya que el acuerdo incluía la salida de Daniel Núñez (PC) de la Comisión de Hacienda, para dar paso así a Kast, mientras que Ricardo Lagos Weber (PPD) debía dejar la testera de la instancia y su puesto ser ocupado por un parlamentario DC.
Sin embargo, esto finalmente no se concretó y tanto Ñúñez como Lagos Weber dieron marcha atrás a sus renuncias, impidiendo le llegada de Felipe Kast, quien acusó que el traspaso ya había sido anunciado con antelación.
“Se ingresaron reemplazos, entre ellos el reemplazo de Hacienda del Partido Comunista por Evópoli, y ese reemplazo quedó ingreso. Después de la votación el Partido Comunista pidió retirar la firma y, claramente, eso no es posible hacerlo, pero eso es lo que se va a discutir en el comité”, acusó Felipe Kast.